14 de octubre de 2014

Burke: Relatio y un necesario pronunciamiento papal

Traducimos a continuación un artículo sobre la opinión del cardenal Burke en relación al sínodo y la Relatio publicada.
El lunes, en una cándida entrevista, el cardenal Raymond Burke dio voz a las preocupaciones de muchos de sus hermanos en el Sínodo y de laicos católicos activistas de todo el mundo afirmando que la presentación pública del Sínodo había sido manipulada por los organizadores del Secretariado General.
Criticó fuertemente la "Relatio post disceptationem" (o "reporte tras el debate") de ayer, al cual el grupo católico laico Voz de la Familia ha calificado de "traición", diciendo que propone puntos de vista que los "fieles pastores... no pueden aceptar", y que traiciona una aproximación que "no es de la Iglesia". Llamó al Papa Francisco a formular una declaración en defensa de la enseñanza católica.
"A mi juicio, tal declaración es largamente esperada", le dijo a Carl Olsen del Catholic World Report. "El debate sobre estas cuestiones se ha estado llevando a cabo por al menos nueve meses, sobretodo en los medios seculares pero también a través de los discursos y entrevistas del cardenal Walter Kasper y otros que apoyan su posición".
"Los fieles y sus buenos pastores están mirando al Vicario de Cristo para que confirme la fe y práctica católica en lo concerniente al matrimonio, que es la célula fundamental de la vida de la Iglesia", agregó.
La relatio, dijo, propone puntos de vista que muchos padres sinodales "no pueden aceptar", y que ellos "como fieles pastores del rebaño no pueden aceptar".
El documento, entre sus propuestas más controversiales, se pregunta si "aceptar y valorar la orientación sexual [de los homosexuales]" puede estar alineada con la doctrina católica; propone permitir la comunión a los divorciados y "vueltos a casar" en una "base de caso por caso"; y dice que los pastores deberían enfatizar los "aspectos positivos" de las formas de vida que la Iglesia considera gravemente pecaminosas, incluyendo el segundo matrimonio civil tras el divorcio y la convivencia premarital.
"Claramente la respuesta al documento en cuestión que siguió inmediatamente a su presentación demostró que un gran número de padres sindoales lo encontró objetable", le dijo Burke a Olsen.
"El documento carece de sólidos fundamentos en las Sagradas Escrituras y en el Magisterio. En una cuestión en la cual la Iglesia tiene mucha riqueza y enseñanzas claras, da la impresión de que se está inventando una nueva enseñanza --la cual un padre sinodal llamó "revolucionaria"-- sobre el matrimonio y la familia. Invoca repetidamente y de forma confusa principios que no están definidos, por ejemplo, la ley de la gradualidad".
Burke lamentó que las intervenciones de los obispos no sean publicadas, mientras que el Secretariado General eligió publicar la controversial relatio, que fue concebida como un mero resumen provisional para la primera semana, y que estará bajo revisión de los padres esta semana.
"Toda la información concerniente al Sínodo es controlada por el Secretariado General del Sínodo que ha claramente favorecido desde el principio estas posiciones expresadas en la Relatio (...) de la mañana de ayer", dijo.
"Mientras las intervenciones individuales de los padres sinodales no se publican, la Relatio de ayer, que es meramente un documento de discusión, fue publicado inmediatamente y, me dicen, aún presentado en vivo. No hace falta ser un científico espacial para ver el enfoque en el trabajo, el cual ciertamente no es de la Iglesia".
Mientras los críticos de las intervenciones públicas de Burke en el sínodo lo han retratado como el representante de una facción, él fue elegido por sus hermanos obispos para moderar uno de los tres grupos anglófonos que discutirán la relatio esta semana.
Y para cerra, un video periodístico de Michael Voris. Es curioso cómo los cardenales en conferencia de prensa evitan una respuesta concreta a las preguntas puntuales del periodista.


No hay comentarios.:

Publicar un comentario

Se agradecen los comentarios firmados. Los que ofendan la sensibilidad religiosa, las buenas costumbres o el buen gusto del administrador, quedarán en revisión.